Leo de nuevo Auto de fe. Qué maravilla, qué maravilla.
Elías Canetti, un pensador desubicado*
Escritor incómodo, pensador torturado y ensayista impreciso son otras tantas maneras de hablar sobre un autor difícil, casi imposible, de ubicar. Para los más académicos, aunque recibió el Nobel de literatura, Canetti es un autor menor, con una obra poco equilibrada y, lo que es peor, incomprensible por su exagerada y arrogante voluntad de originalidad. Querer decir algo nuevo sin recurrir a la ciencia de su tiempo sería el gran pecado de Canetti. Otros, acomplejados por el enciclopedismo academicista, lo han convertido en un autor de culto, accesible únicamente para quien tenga una sensibilidad tan artística como crítica con las miserias de la triste condición humana. Canetti siempre se resiste a las lecturas esquemáticas. ¡Inclasificable!...
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*aclaración C.E: el adjetivo "desubicado" es del autor del artículo linkeado, un español, y digamos que en nuestro país sería más que peyorativo. Creo que igual se entiende a qué se refiere. ¿O estará refiriéndose al pelo de Canetti? Si así fuera el desubicado es el español porque ese pelo, esa cara, esos anteojos, le guste o no a ese señor, tienen toda la onda!
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